De rodillas y con las manos juntas, un grupo de migrantes pide ayuda desde un centro de Detención en Miami.
Con sus cuerpos formaron la palabra de auxilio “SOS” pues los más de 100 migrantes, en su mayoría cubanos y venezolanos, dicen estar retenidos en condiciones inhumanas pues hay una sobrecapacidad de casi el 300%.




