Gran polémica ha levantado el anunció que se diera el día de ayer acerca de que si una persona paga la casa que invadió, ésta podría adjudicársela como propia.
Y es que el plan del Infonavit es que no se desaloje a nadie, por lo que las personas que «invadieron» una vivienda deshabitada de ese organismo, puedan adquirirla mediante un arrendamiento con opción a compra y escriturarla a su nombre, en un periodo no máximo de cinco años.
Obviamente esta medida originó cientos de críticas, pues para muchos es como proteger a los invasores, que, en gran parte de los casos, se apropia de las viviendas de forma violenta, aseguran. Actualmente hay 145 mil viviendas que se encuentran invadidas en el país.
El titular del Infonavit explicó que cuando la casa es ocupa por un tercero, “pues no los vamos a sacar, pero sí le vamos a advertir que, si no se regulariza, nunca va a ser dueño de la vivienda, la puede ocupar, pero no va a ser de él, y lo que queremos es que sea de él, entonces, estamos planteando que la puedan adquirir a un precio muy económico”.
Ante la polémica hoy la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, precisó que la excepción (para no normalizar la invasión) sería que haya una carpeta de investigación por un despojo, es decir, el propietario del inmueble tendría que demandar al inquilino para que no proceda el hecho de que pueda ponerla a su nombre.




